lunes, julio 28, 2008

Sistema Financiero en Quiebra

La casa propia es el activo más importante de una familia, no sólo las estadounidenses, en cualquier latitud la posesión de una casa es quizá la parte más importante del patrimonio familiar, para adquirir este activo que no sólo alberga a la familia sino que constituye, debido a su supuesta revaloración la más importante inversión que un familia puede hacer, y para ello, se endeuda. Ahora, su valor se ha transformado en el principal signo de interrogación que se cierne sobre el sistema financiero y la economía mundial.

Normalmente una casa, nueva o usada se adquieren mediante endeudamiento con garantía del propio bien inmueble (en EU es también práctica común otorgar hipotecas para casas usadas), se considera una inversión segura puesto que se parte del supuesto que las casas siempre suben de precio, y que por tanto, el riego para el otorgante del crédito es bajo puesto que en caso de incumplimiento del pago de la hipoteca puede recuperar la casa (la garantía) y subastarla a algún otro interesado. Por este motivo se consideraba a la hipoteca, como un documento (un valor o instrumento de inversión) de muy poco riesgo y que a su vez podría convertirse en base para otras inversiones, me explico.

Durante los últimos 10 años, Wall Street creó un mercado de más de US$2 millones de millones de dólares en la compra y venta de valores respaldados por hipotecas estadounidenses, esto es lo que se conoce como bursatilización de estos instrumentos creando un mercado en donde los inversionistas podían comprar o vender hipotecas o, más exactamente instrumentos de inversión ligados a hipotecas. Su entusiasmo descansaba sobre dos ideas tradicionales y una más reciente. Los inversionistas creían, como ya hemos dicho, que el valor de las viviendas estadounidenses no caería a nivel nacional y que los deudores casi siempre estarían al día en el pago de sus hipotecas.

Aquí viene la gran idea de los “gurús o genios financieros” de Wall Street que fue, por así decirlo crear instrumentos de inversión en donde empaquetaban hipotecas, esto es, un instrumento de estos contenía el respaldo de varios tipos de hipotecas otorgados a diferentes clases de deudores, estos instrumentos o valores hipotecarios se “colocaron”, es decir se vendieron por todo el mundo, los adquirían fondos de pensiones, bancos, y por supuesto inversionistas privados y se pensaba que estos instrumentos dada su solidez y bajo riesgo, solidificaría la resistencia de la economía global en caso de que algo saliera mal….

Y ese algo que salió mal, salió mal precisamente en los que supuestamente era la garantía por si algo salía mal, y esta vez, y para variar, por supuesto que la causa del problema fue la Reserva Federal, el gobierno de los EU pero, sobre todo, es mi opinión, nulo ahorro del estadounidense. Veamos…

La gráfica que sigue muestra el porcentaje de ahorro como proporción de los ingresos netos personales la caída es elocuente, y habla por sí misma de un 13 % en los 80’s a cantidades negativas -2%. Esto es, los estadounidense se acostumbraron a no ahorrar, pero eso sí, a consumir de prestado.




El dinero tiene un costo, y este es, por supuesto, las tasas de interés; en un mercado de dinero libre y no intervenido por la mano negra de la Reserva Federal (o de Banco de México aquí, o de algún “genio”) la escasez de dinero ahorrado elevaría las tasas, y al contrario, la abundancia de dinero ahorrado las bajaría. Pero… violentando esta elemental regla, los banqueros centrales en su afán de hacer malabarismos con la inflación y el crecimiento económico…y salvar a Wall Street manipulan las tasas casi siempre en sentido opuesto a lo que debiera ser y tiene consecuencias…

La siguiente gráfica muestra las tasas de interés hipotecarias a 30 años en donde puede verse claramente la incongruencia entre el ahorro y la tasa que a su vez depende de la de referencia establecida por la Fed.



Normalmente cuando se adquiere una vivienda de pide un enganche, pero, si el estadounidense no podía ahorrar, como lo hemos visto, lo imposibilitaba a juntar lo suficiente para comprar la casa, sin importar que tan bajas fueran las tasas hipotecarias; solución: Eliminar el enganche, después de todo, el precio de las casas supuestamente siempre subirían, y así el gran grueso de la población, podría hacerse de una vivienda.

Y, así fue…liderados por Country Wide Financial Corp. Que inventó las hipotecas “subprime”, especialmente diseñadas para los hispanos en California les permitía hacerse de una casa sin enganche, y casi sin pago mensual al grado que debido a la facilidad en el otorgamiento de los créditos los compradores optaban por casas de mayor precio al que por su capacidad de pago podrían aspirar…

Y esto creo una burbuja financiera, una manía financiera. El entusiasmo de los inversionistas por un activo, en este caso las viviendas estadounidenses y las hipotecas, lo hace parecer más sólido de lo que en realidad es, lo que eleva los precios a niveles que prácticamente garantizan una caída. "Los viejos como yo esperábamos que el reventón ocurriera antes", dice el inversionista George Soros, de 77 años. "Muchos nos cansamos de esperar".

Y la burbuja reventó, las tasas de interés no podían permanecer infinitamente bajas, las subieron, la gente que apenas y podía pagar, dejó de pagar, los “genios” financieros respondieron empaquetando las hipotecas subprime junto con las buenas, para poder seguir colocándolas entre los inversionistas de medio mundo, vamos hasta los suizos de UBS, tan conservadores y medidos en el riesgo, cayeron en el garlito.

En cuestión de meses, no obstante, gran parte de las promesas de la nueva arquitectura financiera, y sus supuestos, terminó siendo un espejismo. El precio de las casas cayeron y los deudores dejaron de pagar, los dos supuestos fallaron y se ha desatado una crisis comparable a algunos de los mayores desastres financieros de los últimos 50 años.

Hasta el momento, las pérdidas potenciales parecen manejables en comparación con la crisis de la deuda externa que afectó a América Latina en los años 80 y el reventón de la burbuja de acciones tecnológicas que duró entre 2000 y 2002. Sin embargo, el saneamiento de la debacle inmobiliaria podría demorar más que el de esas crisis pasadas debido a su gran complejidad.

La crisis actual, sin embargo, tiene diferencias importantes con la bursátil y la de las instituciones de ahorro y préstamos. De partida, se centra en activos, las viviendas, que, al contrario de las acciones, la mayoría de la gente está dispuesta a endeudarse para comprar. En promedio, la deuda hipotecaria equivale a casi la mitad del valor de las casas. En los últimos años, la facilidad para encontrar crédito ha permitido a algunos propietarios endeudarse por hasta el valor total de su vivienda, por lo que su nivel de apalancamiento es mayor que el de un fondo de cobertura.

Los bancos están mucho menos expuestos que durante los años 80. No obstante, el traslado de los préstamos desde los bancos al mercado ha creado una complejidad abismal que amenaza con prolongar la crisis.

En el caso de la deuda externa latinoamericana, La Fed y el Departamento del Tesoro de EE.UU. instaron a cientos de bancos a renegociar miles de millones de dólares en deuda con varios países. "Había incertidumbre en cuanto a la valoración, pero era más sencillo: se conocía la dimensión de la deuda y quién la tenía, un grupo relativamente pequeño", dice Volcker. "Esto es mucho más complejo".

Hoy, las hipotecas están repartidas entre bancos y más de 11.000 grupos de inversión, cada uno de los cuales puede tener cientos, sino miles, de inversionistas. Muchos de estos valores también son parte de vehículos de inversión estructurada, conocidos como SIV, o de obligaciones de deuda colateralizada, CDO por sus siglas en inglés. Cada uno tiene sus propios inversionistas por lo que determinar quién posee estos valores, cuánto valen y cuál es la naturaleza de las garantías involucradas es un proceso difícil. Para calcular el valor de una CDO, por ejemplo, hay que analizar más de 100 valores por separado, cada uno de los cuales contiene varios miles de préstamos individuales.

Lo que ha ocurrido con el mercado inmobiliario se ciñe a un patrón que Soros ha observado desde que comenzó en el negocio de las inversiones en 1968.

Los fundamentos económicos, sostiene, son lo que supuestamente determinan el precio de los activos. Pero a menudo una avalancha de capital hace que los fundamentos del activo parezcan más sólidos de lo que realmente son, lo que atrae más capital. "Siempre es lo mismo", dice Soros. "La disposición a prestar mejora el valor del colateral. A la larga, se llega a un punto donde el valor del colateral empieza a caer, lo que reduce la disposición a prestar, lo que refuerza la caída en el valor del colateral".

Los valores financieros ligados a hipotecas suelen consistir de 10 o más tipos de créditos inmobiliarios, desde las de menor riesgo hasta las de mayor riesgo.

Cada clase de deuda tiene sus propias reglas acerca de cómo y cuándo los inversionistas reciben su dinero o sufren pérdidas. "Tal vez los inversionistas lo perderán todo. Tal vez no. No lo sabremos sino hasta dentro de dos o tres años"

Por lo pronto, y regresando al tema principal que es la inflación, la crisis de la deuda subprime tiene atados de pies y manos a la Reserva Federal, no pueden subir las tasas de interés para contener la inflación por que al hacerlo exacerbaría el problema hipotecario, la morosidad se incrementaría, las casas perderían aún más su valor…

En síntesis, estamos ante en problema terrible que tiene a los principales bancos e hipotecarias de los EU en una virtual quiebra, vamos para que me entiendan es como un Fobaproa pero de proporciones inmensamente mayores por que de entrada implican a una economía inmensamente mayor, y este fenómeno no sólo se dio en EU, Inglaterra, España, entre otros, también sucumbieron a la burbuja inmobiliaria.

La humanidad esta ante un gravísimo problema, los culpables son dos, primero la Reserva Federal (Alan Greespan) por manipular las tasas de interés contrario a la lógica del mercado, el gobierno de los EU por su enorme déficit fiscal, un gobierno quebrado que deberá rescatar instituciones quebradas, seguiremos profundizando sobre el tema….

1 comentario:

  1. Anónimo3:54 p.m.

    Muy buena tesis. Me parece bastante exacta.

    Tal vez yo le añadiría el peso del costo de la guerra de irak y como este hecho ha influido en la crisis. Me parece que la avidez por ganancias fáciles en la guerra llevó a la fed a inflar la moneda hasta más no poder con la intención de financiar la aventura. Y la única manera de hacerlo era bajando las tasas de interés con los resultados ya señalados.

    La guerra cuando es ilegitima, o sea, cuando no es en defensa de los derechos tal como la de irak, se convierte contablemente en un desperdicio, una destrucción de riqueza que naturalmente se comen el patrimonio de los ciudadanos. Porque están gastando recursos a cambio de nada. Finalmente se comen lo que habían ahorrado.

    Esa es la historia hoy en estados unidos y buena parte del mundo en los que como bien decís, las familias ya perdieron buena parte de su patrimonio.

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