Nos dicen que debido a que en la propuesta de Reforma
Fiscal va a:
1. Dar seguro de desempleo.
2. Dar Pensiones a Adultos Mayores.
3. Establecer un sistema universal de salud.
Que tiene un “alto contenido social”...????
También, nos dicen que el país no ha crecido en 30 años,
y que para promover el crecimiento el gobierno necesita más dinero para
establecer un “vigoroso gasto público en infraestructura”, tan es así que
plantean un déficit de 0.4% del PIB, algo no visto, desde 1994.
Así, que sí, debido a que el PIB es un indicador
keynesiano y que considera al gasto público como parte de la producción, muy
probablemente, hagan crecer al PIB, algo muy diferente a hacer crecer la
economía.
Sin embargo, tenemos visiones completamente encontradas
con lo que es crecimiento económico: Para el gobierno, y los economistas
keynesianos que revolotean alrededor, el crecimiento del indicador PIB es la
medición del crecimiento de la economía. Para los economistas de la Escuela
Austriaca, el PIB es un absurdo véase “Podemos creerle al PIB” , y el crecimiento de la economía se da cuando se
incrementa la cantidad de Capital invertido, esto es: Que existen más y/o que
los existentes crezcan, estamos pues hablando de: Fábricas, edificios para
renta, máquinas bienes de capital, hoteles, bares, restaurantes, tiendas,
autobuses, aviones, en fin, todo aquello que produce una utilidad, que además
muy importante, lo más importante promueven el empleo.
Y ese es
el mayor problema de México:
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación
y Empleo del INEGI, seis millones 427 mil mexicanos no
trabajan ni buscan activamente un trabajo por considerar que no tienen
oportunidad de encontrarlo.
Esa cifra es más del doble de los dos millones 607 mil
369 desempleados que sí están buscando una plaza. Los mexicanos sin esperanza
laboral no son considerados como personas sin trabajo por el Instituto Nacional
de Estadística y Geografía (INEGI).
También esos 6.4 millones de desalentados son 18% de los
35 millones 803 mil personas de la población no económicamente activa (PNEA).
La encuesta revela que los más afectados por la
desesperanza son casi tres millones de jóvenes, es decir 45%; los de más de 60
años representan 20 por ciento.
A detalle, los indicadores estratégicos de Ocupación y
Empleo del primer trimestre del año señalan que un millón 500 mil mexicanos de
14 a 19 años de edad, pese a tener interés de trabajar, no participan en
ninguna actividad productiva, mientras que un millón 200 mil tenían entre 20 y
29 años.
Desaliento, por falta de empleo
El número de mexicanos sin esperanza de encontrar una
oportunidad laboral se incrementó durante los primeros meses del gobierno del
presidente Enrique Peña Nieto.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) revela
que seis millones 427 mil mexicanos no trabajan ni buscan activamente un empleo
por considerar que no tienen oportunidad, aunque poseen interés de incorporarse
a las actividades productivas del país 71 mil 432 personas más que las
registradas hasta diciembre de 2012, cuando arrancó el sexenio.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y
Geografía (INEGI), hasta junio de este año la Población No Económicamente
Activa (PNEA) ascendió a 35 millones 803 mil, cantidad de la que 18 por ciento,
pese a estar disponible para trabajar, permaneció inmovilizada.
Hasta el segundo trimestre de este año, dos millones 607
mil personas fueron consideradas como desocupadas, ya que buscaban activamente
una oportunidad de trabajo, mismas que representan una tasa de cinco por
ciento. Este es el desempleo “oficial”.
Al considerar a la población disponible con la
desocupada, de acuerdo con la definición del INEGI, la tasa de desocupación
alternativa en el país alcanza el 15 por ciento, equivalente a poco más de nueve
millones de personas. Este es el desempleo real, y si además consideramos que
más del 60% de la población está en la economía informal, no estamos muy lejos
de las cifras patéticas de los españoles, griegos, portugueses, italianos,
franceses, con tasas de desempleo arriba de 20% especialmente en los pobres.
Crece abandono
La escasa oferta de empleo en el país ha detonado el
número de desalentados.
Son personas que ante la falta de
oportunidades en el mercado laboral han decidido desistir en su búsqueda. La
gran mayoría son individuos que tocaron las puertas de varias empresas por un
tiempo considerable, pero no lograron colocarse, por lo que han perdido el
ánimo de continuar con la tarea de encontrar un trabajo.
Según las últimas cifras disponibles, los más afectados
por la desesperanza son los jóvenes, con 45 por ciento, mientras que aquellos
de más de 60 años representan 20 por ciento.
Los indicadores estratégicos de Ocupación y Empleo señalan
que un millón 500 mil mexicanos de 14 a 19 años no buscaban integrarse a
ninguna actividad productiva, pese a tener interés de trabajar, mientras que un
millón 200 mil tenían entre 20 y 29 años.
Están en búsqueda de su primer o segundo
empleo. La falta de experiencia frena su incorporación al mercado laboral, por
lo que después de encontrar las puertas cerradas deciden tirar la toalla.
A la lista se suman 711 mil personas de 30 a 39 años de
edad; 730 mil de 40 a 49 años, 659 mil de 50 a 59, mientras que los mexicanos
de 60 y más años suman un millón 300 mil.
La edad es el obstáculo de la población que
supera los 40 años, pero la oferta de trabajos para aquellos que rondan los 60
es nula.
Entonces pregunto ¿No es de lo más urgente revertir esto
y alentar el empleo? ¿No es la mayor injusticia social el desempleo?
El gobierno para paliar este programa se ha dado a crear
puestos en la ya de por sí enorme burocracia, parasitaria, los empleos los pone
el gobierno. ¿Hacer crecer al parásito es “Justicia Social”? Vamos siguiendo
exactamente el mismo camino que España, Portugal, Grecia, Francia. Esto es,
matar al sector productivo, terminar con la actividad empresarial y preponderar
la actividad burocrática. Sólo que ésta no puede seguir creciendo a costa del
huésped, el sector productivo de la economía que languidece, agoniza ante los
incrementos de impuestos y la enorme cantidad de regulaciones que limitan o
evitan el desarrollo de la actividad.
El panorama expuesto aquí se va a agravar con la Reforma
Fiscal. Sí, el PIB podrá crecer momentáneamente por el efecto del mayor gasto
público, y quiero pensar que el gasto público va a destinarse a
infraestructura. Pero, ¿Crecerá el empleo?, no, la respuesta es no. Una obra de
infraestructura de gran envergadura como las hidroeléctricas “El Cajón, o
Huites”, tan sólo generan unos 3,000 empleos directos, pero requieren
inversiones del orden de los 800 millones de dólares. Los empleos crecen en
forma significativa en los sectores que son ahora golpeados por la “Reforma
Fiscal”:
1. Maquiladoras, que ahora se les impone el IVA en la
importaciones temporales de insumos. Haciendo con esto más caro, y por
consiguiente, menos atractiva la inversión en este rubro.
2. Pequeñas empresas: Se termina el régimen de pequeños
contribuyentes, ahora, las pequeñas empresas pagarán como las grandes empresas.
Esto es, declaraciones de IVA, ISR, etc. Mensuales, lo que además de los
impuestos intrínsecos tendrá que pagar más a contadores que les indiquen cuánto
y cómo pagar.
3. Incrementos en el costo de los empleos, al no hacer
deducibles de impuestos los costos de la seguridad social. El nuevo seguro de
desempleo va a ser financiado por los patrones.
4. El IVA en rentas, son una infinidad de PYMES las que
pagan renta, el aumento los obligará a subir sus precios, pero si el mercado no
los reconoce, quebrarán.
5. Aumento en el ISR a empresas, más 10% a los dividendos,
más el PTU (principio marxista de la “Participación de utilidades”), hacen que
las empresas mexicanas tengan una carga fiscal que las hace muy poco rentables.
Esto incidirá en la inversión extranjera directa, la productiva, que
seguramente preferirán otros lugares en donde sus empresas sean más rentables. Como el México no existe CAPITAL suficiente, las inversiones significativas vienen de fuera.
La gente está muy preocupada por los impuestos a los
alimentos de mascotas, IVA a colegiaturas, a inmuebles, a hipotecas, a
espectáculos. Los impuestos que afectan a la clase media, yo también lo estoy,
pero no es lo peor.
Lo peor de la “Reforma Hacendaria”, es el golpe brutal
que le pega a la actividad empresarial desde PYMES a grandes empresas. Y es lo
peor porque afectan a lo único que puede aliviar el problema del desempleo. El
desempleo, los desalentados, los bajos salarios que a su vez generan toda
suerte de problemas sociales y pobreza, mucha pobreza. Un país no puede
erradicar la pobreza golpeando a la inversión, y a las clases medias. Por el
contrario, la va a agrandar.
Lo he escrito aquí y lo vuelvo a escribir: La única forma
de erradicar la pobreza es mediante la inversión de capital continua e
incesante, esto es lo único que produce crecimiento económico genuino, no del
PIB, sino del genuino, del real, crecimiento de la frontera de las posibilidades de
producción, esto significa, el crecimiento de los negocios existentes y la
creación de nuevos. Esto y sólo esto es lo que nos podría sacar de la pobreza.
Esto es lo único que puede bajar el desempleo, subir los salarios. Lo único.
Pero nuestros gobiernos, no lo entienden, ven a los
negocios y a la gente productiva sólo como una fuente de ingresos, a la que hay
que exprimir al máximo para dar regalos visibles a los jodidos que son los más,
y que no pagan impuestos, pero votan, y votan por ellos. Ese es su único
interés, es la perversión de la democracia, gana el que más regalos da, no el
que mejora la situación económica. La precaria situación económica puede
decirse que es originada por causas “externas” y con ello valga la redundancia
externalizar su culpabilidad, y ganar las elecciones a pesar de haber destruido
la economía del país. Así ha sido en los países referidos o en el epítome de
los países comunistas como Venezuela, que no tienen ni papel higiénico, Cuba,
Corea de Norte, Bolivia, etc.
Claro que el gobierno entiende lo que va a suceder... ellos mismos están provocando todo, no creo que se les esté saliendo de las manos. Lo que va a pasar, es lo que quieren que pase.
ResponderBorrarSi, pense que solo yo lo veia asi, me da la impresion que es el perverso plan "todos jodidos para que estemos en el poder otros 75 años"
BorrarNo, Anónimo, es el real motivo, perpetuarse en el poder: Más jodidos más regalos = Más votos. Perverso.
BorrarNo se si vendrá de este gobierno porque esto ya tiene decadas, lo que si es que no parece, asi es: Nos quieren jodidos, sin educación, sin dinero, sin un futuro cierto. Para que el rico se haga mas rico y el jodido no pueda ni tenga recursos para protestar.
BorrarMas jodidos, más regalos = Más votos.... hasta que se acaban los que tienen dinero para pagar la fiesta. Y allá vamos derechito.
BorrarAunque es una visión poco probable,
ResponderBorrarEspero que la diversidad de ideologías en la legislatura actual, causen un revés en la propuesta de reforma hacendaria, que además de pegarnos a muchos, promueve la informalidad y la separación económica a mayor nivel